✍️ Jesús Torres
No era necesario ni conveniente llegar a un episodio violento o de brutalidad en el caso del desalojo de estudiantes del Instituto Tecnológico Superior de los Ríos en el municipio de Balancán.
Al final del día, las autoridades de gobierno, maestros, alumnos y la mediación de los partidos PRI y PRD, lograron destrabar el conflicto con la aceptación de un pliego petitorio a favor de los afectados, incluida la reparación de daños materiales.
Se contempla además, retirar órdenes de aprehensión, el reconocimiento a los líderes estudiantiles y dar de baja a personal que llegaron con el ahora exdirector de la institución, Iván Arturo Pérez Domínguez.
Quién haya dado la orden de enviar antimotines para disolver la protesta no previó que las imágenes escalarían al ámbito nacional en medios de comunicación, plataformas digitales así como redes sociales, que consignaron el violento desalojo.
En San Lázaro, el diputado federal del PRI, Erubiel Alonso Qué alzó la voz, lo mismo que los dirigentes del PRI y PRD en Tabasco, Miguel Barrueta y Rafael Acosta, así como legisladores locales de oposición.
Si tras el escándalo, por el uso de la fuerza contra los estudiantes, se anunció la renuncia del ahora exdirector del Tecnológico de los Ríos para atemperar los ánimos, resultaba entonces innecesario el uso del tolete y gases lacrimógenos.
Vamos, si era uno de los principales reclamos del estudiantado, que denunciaban presunta malversación de recursos, nepotismo y acoso sexual del exdirectivo del Tecnológico de los Ríos, ¿porqué prolongaron su permanencia en el cargo durante más de un mes, desde que inició la protesta?
Por lo pronto el PRD en voz de su dirigente, Rafael Acosta exigió la renuncia del secretario de gobierno, Pepín López Obrador a quien responsabiliza de haber ordenado la represión contra los estudiantes.
El encargado de la política interna del estado y hermano de AMLO, recientemente explotó contra la prensa a quienes tachó de ‘buitres’ por andar tras la nota roja y destacar la violencia que se vive en Tabasco.
¿Qué sigue en este conflicto después del zipizape y la caída del director del Tecnológico de los Ríos?
Además del cumplimiento del pliego petitorio, estudiantes y maestros pedirán a la Secretaría de Educación Federal revisar los antecedentes de Mari Carmen Bravo Guzmán, directora interina del Instituto Tecnológico Superior de los Ríos.
Y es que en el 2018 su gestión al frente de la Universidad Tecnológica del Usumacinta, junto con la Universidad Tecnológica de Tabasco, se vio involucrada en un desvío de 70.2 millones de pesos observados por la Auditoría Superior de la Federación.
