Las fuerzas israelíes aseguran que están “tratando de entender” por qué había tanta gente en Beit Lahiya en el momento del ataque que, según las autoridades palestinas, mató a más de 90 personas.
Al menos 93 personas, incluidos 25 niños, murieron en el ataque a un edificio de varios pisos el martes, según el Ministerio de Salud de Gaza. Se cree que es uno de los ataques más letales de la reciente campaña de bombardeos de Israel en el norte de Gaza y ha sido condenado por grupos de derechos humanos y ONG.
David Avraham, portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), dijo a CNN que las FDI todavía “tratan de entender” por qué había tanta gente en la zona en el momento del ataque, diciendo que se había ordenado a los civiles que evacuaran “hace varias semanas”.
Las fuerzas israelíes estaban atacando a un “presunto terrorista” que habían visto en la zona y no tenían intención de “derribar el edificio”, dijo Avraham, antes de añadir que el investigan lo sucedido.
Durante una reunión informativa la semana pasada, el general de brigada Elad Goren, jefe de los esfuerzos humanitarios civiles de las FDI en Gaza, dijo que “según tenemos entendido, no hay población” en Beit Lahiya.
El portavoz de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, Jeremy Laurence, dijo que la ONU estaba “horrorizada” por el ataque, al que calificó de “uno de los ataques más mortíferos en Gaza en casi tres meses”. Tras destacar el compromiso de Israel de investigar el ataque, la ONU subrayó la necesidad de “una investigación rápida, transparente y detallada sobre las circunstancias de este ataque y las responsabilidades por él”. (CNN)