✍️ Eugenio Hernández Sasso
Bastaron siete meses para que Eduardo Ramírez Aguilar, con humanismo, determinación y firmeza, pero sobre todo con voluntad, lograra posicionarse en primer lugar en la evaluación de su trabajo en general y colocar a Chiapas en la segunda posición de las encuestas en materia de seguridad.
Si bien es cierto que al arrancar su gobierno, el 8 de diciembre de 2024, el nivel de criminalidad en la entidad era muy alto, tampoco se puede negar que las acciones puestas en marcha han dado resultados satisfactorios para la población.
Estudios de diferentes organizaciones señalan que Chiapas ha presentado una disminución superior al 50 por ciento, en materia de homicidios dolosos, en el primer semestre del presente año, en comparación al 2024.
La más reciente encuesta de FactoMétrica coloca a Eduardo Ramírez en primer lugar. Lo evalúa y aprueba con un 72.2 por ciento en su desempeño.
El trabajo de la presente administración se ha destacado por hacer las cosas bien y por desechar a los funcionarios que no han estado al nivel de las exigencias de la Nueva ERA.
De ello pueden dar cuenta varios personajes a quienes les han dado las gracias, incluidos aquellos que nunca entendieron que Eduardo Ramírez tiene amigos, pero el gobernador no.
Desafortunadamente pensaron que solamente iban a nadar de muertito durante el sexenio, como en el pasado, en honor a su relación de afecto con El Jaguar. ¡Qué pena! Se equivocaron.
El asunto es que el equipo se ha ido perfeccionando, dado que la eficiencia del gabinete tiene que ser total para que se puedan lograr los resultados comprometidos con la sociedad.
En mayo del presente año, Chiapas ya se encontraba en segundo lugar en materia de seguridad, solo por debajo de Mérida, Yucatán, lo que hace suponer que en los siguientes estudios de opinión se disputará el primer lugar en la materia.
Lo cierto es que en la entidad se respira paz y tranquilidad, después de muchos años de sufrimiento porque los criminales tenían secuestrado el territorio.
La encuesta de FactoMétrica hace notar que Eduardo Ramírez está en primer lugar y supera a todos los gobernadores del país en la evaluación de su trabajo general.
Si revisamos el desempeño de sus homólogos del Sur-Sureste, de acuerdo al sondeo de opinión, Ramírez Aguilar es el único que ha roto con aquello de que “el norte trabaja, el centro administra y el sur descansa”.
Por ejemplo, Mara Lezama, en Quintana Roo, se ubica en la posición número nueve de la tabla de valoración; Oaxaca, gobernado por Salomón Jara, ocupa el décimo lugar; Rocío Nahle, en Veracruz, el lugar once; Javier May, de Tabasco, en el diecisiete; Alejandro Armenta Mier, Puebla, en el veinte; Joaquín (Huacho) Díaz Mena, Yucatán, en el veintiuno; Evelyn Salgado, del estado de Guerrero, lugar veintiséis; Layda Sansores, Campeche, en el penoso puesto número veintisiete.
Sassón
Si el asunto de Hernán Bermúdez Requena fue un distractor del gobierno vino tinto, les ha funcionado bastante bien hasta ahora; si, por el contrario, es de a de veras que lo van a detener vivo, entonces estamos en el umbral de conocer la posible operación de una red de narcopolíticos mexicanos.